Vino Grands Echezeaux 2006

Vino Grands Echezeaux 2006

HISTORIA:

La bodega se encuentra en el municipio francés de Vosne-Romanée, en la zona de la Côte de Nuits, lugar en donde se producen vinos verdaderamente reconocidos a nivel mundial por sus propiedades y características.

Domaine de la Romanée-Conti pertenecen a la actualidad a las familias Villaine y los Leroy/Roch, ambas borgoñesas, y comprenden una bodega, varios vinos y varios viñedos cuyos orígenes se remontan al siglo XIII.

Las condiciones de suelo y de clima que permiten crecer vides consistentemente maravillosas, tratadas por expertos con enorme reconocimiento y convertidas en vinos premiados que, año tras año, resultan maravillosos, tan es así que desde 2015 los viñedos son parte del patrimonio de la humanidad de acuerdo con la UNESCO.

Los viñedos de Domaine de la Romanée-Conti han pasado a lo largo de los años por varias manos. La familia Leroy es copropietaria de la casa desde 1942 y está a cargo de su venta y distribución en casi en todo el orbe. Con principios de biodinámica, cuidan y tratan a sus vides viejas de la forma más natural y con la premisa de que los climas y sus propiedades otorgan verdaderos placeres al disfrutarlos.

La casa produce ocho etiquetas, todas ellas Grand Cru, Romance-Conti, La Tâche, Richeburg, Romance-Saint Vivant, Grands Echezeaux, Echezeaux, Montrachet y Corton. De todas las etiquetas, la Romanée-Conti es la más apreciada y valorada y en ella se prueba una mezcla casi artística de uvas Pinot Noir con una fragancia, aroma, textura y cuerpo que enamoran los sentidos.

Solamente utilizan caballos y no tractores dentro del viñedo para evitar que el suelo se compacte. Una botella de Romanée-Conti se produce con tres racimos de uvas del viñedo y el promedio de producción es de 450 cajas.

Como dato a destacar del terreno, su mineralidad y verdadera expresión de un Pinot Noir, cuentan con 18 mil metros cuadrados que conforman una de las denominaciones más pequeñas de toda Francia.

3,5263 hectáreas.

Añada 2006.

PERSONALIDAD

Es «Grande» antes de ser Echézeaux. Es un aristócrata rural y soñador que caminaría feliz, al paso lento de su caballo, en un bosque lleno de olores: musgo, hojas muertas, compost, caza… Todo esto se expresa «con sentimiento», en un refinado , lenguaje musical, conciso y puro como el mensaje de un cuarteto de Mozart.

JF Bazin.

NOTA DE CATA:

Fase visual: Color rojo cereza, ribete rubí tirando a caoba, capa media baja, lágrima media, brillante con ligeros sedimentos al final de la botella.

Fase olfativa: Al inicio tenía aromas de algo de reducción, notas animales, hemos decidido dejar que se oxigene el vino solo en la botella abierta en la cava (Temperatura de la cava sobre los 14°grados) dos horas, sin decantar ya que teníamos miedo al decantarlo que evolucionará demasiado rápido.

Después lo hemos servido para la cata y ahora sí tenía unos aromas francos: Aromas de cueros, notas especiadas como el clavo, cardamomo, fruta roja madura licorosa como la grosella roja, los arándanos, intensidad alta, oxigenamos agitando la copa para apreciar la intensidad alta y «magia» el vino se abre sorprendentemente dándonos recuerdos de confitura de cassis, aromas floral y herbáceo como de violeta, fruto del endrino, Té verde, champiñón, tostados de caja de puros, cedro, tabaco.

Fase gustativa: Entrada suave, con cierta nota ácida como morder una frambuesa madura, notando su acidez y su dulzor envolvente, tanicidad presente pero bien integrada donde la sequedad forma parte de su bouquet, alcohol algo cálido pero sin ser molesto, con cuerpo, mucha intensidad, dándonos unos matices similares a la nariz donde la intensidad en boca es muy amplia y larga, final ahumado y ligeramente amargo, con un posgusto increíble, una vez bebido da la sensación de mantener sus aromas, adaptadas a nuestros paladar como un recuerdo único teniendo su registro clasificado en nuestra memoria.

Momento de consumo: Ahora está sublime, en los próximos años irá perdiendo facultades.

Temperatura de servicio: Creo que conviene tomarlo algo fresco porque depende donde estés subirá rápidamente de temperatura en la copa, sobre los 14 o 16 grados estaría perfecto para disfrutar del vino.

Armonía: Cocina mediterránea, guisos suaves tipo Ragut de caldereta de cigalas y rape, tartar de atún, carpaccio de gamba roja, pescados blancos a la plancha o con salsas medias como lenguado menier, caracoles a la borgoña, solomillo Wellington, estofados de caza menor, postres tipo coulant de chocolate, soufle, quesos semicurados, ensalada de frutas.